El Crítico y su finalidad

La crítica por sí, tiene dos vertientes conceptuales, la primera, consiste en “analizar pormenorizadamente algo y valorarlo según los criterios propios de la materia de que se trate[1]” y la segunda, “hablar mal de alguien o de algo, o señalar un defecto o una tacha suyos”, siendo esta última la más reconocida. Estamos claros que criticar para la mayoría tiene una connotación negativa. Ahora bien, suena sencillo, pero puede ser muy complicado. Decía Oscar Wilde, que “que criticar o hablar de algo es mucho más difícil que hacerlo y no hacer nada es la cosa más difícil del mundo[2]” y que el mejor crítico es “el parcial, insincero e irracional”. ¿Qué fuerte no? Pero así era Wilde, siempre contracorriente.

Desde André Bazin hasta la actualidad ha existido la discusión sobre la metodología de analizar el cine. Algunos se inclinan por el rigor del cumplimiento del lenguaje cinematográfico, el aspecto técnico, como es el sonido, montaje, iluminación, edición, etcétera, otros, por el análisis de la historia o la interpretación de la obra realizada. Me inclino más por ésta última, ya que discutir sobre aspectos técnicos en esta época de avances tecnológicos, solo valdría la pena si es algo, verdaderamente grosero. Ya saben, por aquello de criticar.

Ahora bien, como todo, la crítica debe tener una finalidad, servir para algo, sobre esto, W. H. Auden, ha dicho lo siguiente:

¿Cuál es la función del crítico? En lo que me concierne, puede brindarme uno o más siguientes servicios: 1) Presentarme obras o autores que desconocía. 2) Convencerme de que una lectura descuidada me llevó a subestimar una obra o un autor. 3) Indicarme relaciones entre obras de diferentes épocas y culturas que mis escasos conocimientos no me permitieron – ni me permitirán- detectar por mi cuenta. 4) Hacer una lectura que profundice mi comprensión de la obra. 5) Explicar el proceso de “composición artística. 6) Iluminar la relación del arte con la vida, la ciencia, la economía, la ética, la religión, etc[3].

He ahí la cuestión y la posición que entiendo más cercana a lo que puede buscar alguien interesado en ir más allá en la comprensión de una película. La explicación que sobrepasa el otorgarle una calificación en base a una escala o del me gustó o no. Es esa búsqueda de significado y esfuerzo por descifrar la obra del realizador y muchas veces, de ahí saldrá una obra completamente nueva, incluso para el propio creador. Se podría decir que es una visita guiada.

Cuando Auden se refiere a “presentarle obras o autores desconocidos”, entiendo como el principal trabajo de la crítica, ya que lo popular siempre tendrá su espacio y el gran mercado que le genera la publicidad. Sin embargo, autores como Nelson Carlo de los Santos, y su Cocote (2018), en nuestro caso, o como Alexandra Márquez y sus “Niñas bien” (2019), no se les reconocería la valía audiovisual de sus trabajos, sin que estos no fueran expuestos por la crítica que aboga por ellos. Al final de cuentas, Fast & Furious, se vende sola y por millones.

En el cine se resume todo lo bueno y lo malo que tenemos nuestra sociedad actual. La levedad, la evasión y sencillez argumental, las encontramos en el cine comercial. El popular, ése al que uno va para desconectar de la vida real y sentarse voluntariamente al disfrute de eso. Por otro lado, están aquellos ejercicios audiovisuales que buscan de alguna manera u otra, acercarnos a realidades distintas. Ambos escenarios son válidos. Ambos espectadores también. Los distingue la finalidad. El crítico deberá navegar en los dos mundos, con el riesgo inherente de naufragar.


[1] Diccionario de la Real Academia Española, consultado el 15 de agosto de 2019. Disponible en: https://dle.rae.es/srv/search?m=30&w=criticar.

[2] Oscar Wilde. La Importancia de discutirlo todo: el crítico como artista, en Oscar Wilde, Collected Works. Complete and Ubabridged. New York: Barnes & Noble, 2006, pp, 1173-1224.  

[3] Noguera Tajadura, M. y Esqueda Verano, L. (2011). \”\”El papel de la crítica cinematográfica en el panorama audiovisual contemporáneo\”\”. En: Javier Sierra Sánchez y Sheila Liberal Ormaechea (coords.). Reflexiones científicas sobre cine, publicidad y género desde la óptica audiovisual, (pp. 89-105). Fragua. Disponible en: http://dadun.unav.edu/handle/10171/20597. Consultado el 20 de Agosto de 2019

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