La ópera prima de Victoria Linares Villegas (República Dominicana, 1988) es tanto biografía fracturada como la restitución en la memoria familiar y del cine dominicano de un gran crítico y cineasta maldito; una tía le revela por es que “lo que se hereda, no se hurta”: es prima segunda del realizador Oscar Torres. Esto prende una chispa en la joven directora y se apresta a investigar y documentar porqué su familia había borrado de la memoria a ese hombre singular.
El film escruta no solo la vida de Oscar, sino que sirve para trazar paralelismo con los colores variopintos de Linares: sus referentes intencionales o no en el cine, los cuales va desgranando en el registro (recreaciones que de repente remiten a la vanguardia godardiana, cuando no algunos descansos visuales que recuerdan al Ozu de siempre y a un nuevo eterno, Apichatpong Weerasethakul; a veces, una veta de humor lacónico del finés Aki Kaurismäki), sus inquietudes sexuales y crítica directa a la condición inasible y conservadora de gran parte de la dominicanidad.
La hibridación de formatos retrotrae a un tiempo en que las cosas se podían tocar. Celuloide, las cintas de videotape. Poemas. Guiones. Y pensar que hace poco tiempo de ello. Pero este arte joven avanza a mil. Y la consecuencia: una proliferación obscena de imágenes de las que somos beneficiarios, víctimas y victimarios. No necesariamente en partes iguales.
Lo que se hereda vibra positivamente en la mayor parte de su despliegue. Pero por momentos, puede atisbarse cierta pulsión entre la revelación de Oscar Torres y la vida de Victoria. Y el saldo no es necesariamente positivo, pues se puede malinterpretar en algunos momentos como ejercicio de connoisseur cinematográfica cercana al narcisismo (por ejemplo, al estar sentada en la sala de lo que parece ser su apartamento, de repente vemos un primer plano innecesario un poster enmarcado de La Notte de Antonioni, rompiendo el estatismo que toda la escena planteaba). Pero los testimonios entrañables y humanizantes de sus parientes junto las brillantes recreaciones lúdicas de guiones de Torres que Linares logró desentrañar del olvido, lo revitalizan constantemente.
Lo que se hereda es otra muestra de que, en número y en calidad, lo mejor del cine dominicano reside en la no ficción. En esa casa, hablamos, nos comportamos y expresamos todo lo que somos sin ambages. Porque si bien es una intervención de la realidad, es lo que más se nos parece.
FESTIVAL DE CINE FINE ARTS “HECHO EN RD”.
Esta película forma parte de la cartelera del Festival de Cine de Fine Arts, dedicado exclusivamente al cine dominicano, por su HECHO EN RD, desde el 28 de abril al 11 de mayo de 2022, en Finearts en Novocentro.
Consulta aquí la cartelera del festival.
FICHA TECNICA
Dirección y guion: Victoria Linares Villegas
Fotografía: Francisca Sáez Agurto.
Reparto: Victoria Linares Villegas, Milvio Linares, Stephany Liriano, Amarilis Villegas.
Productora: Viewfinder, Zero Chill.
País: Rep. Dominicana-Estados Unidos. 2022
Conductor Infiltrados Radio, Top Latina 101.7 y el canal La Quinta Pata.
Columnista del periódico eldia.com.do.
Edwincruzdr | 
EdwinCruzCine | 
La Quinta Pata / CinependienteRD
En esa película no hay nada ni del cine de Ozu ni de Apichatpong, está bien que se quiera a veces acercar una gran propuesta como esta a otras cinematografías, pero por lo menos que se haga desde el conocimiento y no desde la mención cualquierizada de nombres de directores.
PS: De acuerdo contigo en lo del poster de Antonioni.